domingo, 2 de enero de 2011

Betis 1-0 Nástic. ¡Uff!

¡Que fatigas y qué miedo! ¡Qué forma de pedir y desear el pitido final!

El partido ante el Nastic, uno de los peores equipos que han pasado por el Villamarín esta temporada, ha sido el típico en que hay un rival claramente superior, el Betis; un contrario muy inferior, que sale asustado a evitar la goleada; y al que poco a poco, el más fuerte le va dando vidilla, y cuando te das cuentas el partido se ha ido poniendo rarito, y el público local acaba gritando al árbitro, angustiosamente y con los nervios desquiciados, “¡la hora!”.

Eso ha sucedido hoy en Heliópolis − me gusta llamarlo así; recordando la primera vez que vi esa denominación, a finales de los cincuenta, en un album de cromos, cuando apenas si sabía leer y ya era aficionado al fútbol; aún recuerdo a Otero, Ríos (Ricardo), Isidro, Kuszman, Del Sol− en una tarde agradable, en la que todos nos saboreamos la goleada. Pronto un tiro desde fuera del área de Salva Sevilla, que sale fuera por poco; algo después, aún dentro del primer cuarto de hora, fallo incomprensible de Jorge Molina. Así, poco a poco el juego verdiblanco se fue espesando, aunque todos estábamos tranquilos, esperando los goles que tenían, sin duda, que llegar.

Menos mal que hacia el minuto cuarenta, Jorge Molina se aprovecha en el ángulo izquierdo del área tarraconense de un balón atrás de un jugador del equipo rojinegro; controla, gana la posesión y al defensa no le queda más remedio que hacer penalti. Gol de Emana. Creíamos que en la segunda parte todo cambiaría y el Betis remataría la faena.

Nada de eso. El panorama se fue oscureciendo. Y cuando Salva Sevilla − doy por bien empleado el precio del abono, nada más que por ver a este jugador, que a la gran clase une su generosidad en el esfuerzo y su juego solidario − hubo de dejar el terreno de juego los plomos se fundieron; la luz no volvió, ni siquiera funcionaron los cambios, al contrario que otras veces; y en la oscuridad vivimos una película de terror, que al final, de forma diferente a lo que sucedía la temporada pasada, tuvo final feliz: tres puntos más y el Betis ya suma cuarenta y dos.

Mención especial merece la afición: la fiel, porque cuando el partido se puso feo y difícil, animó al Betis, a pesar de los gritos a algunos jugadores; la otra, la de bar, de tertulia o de boquilla, por la escasa respuesta que ha dado a la llamada hecha por la Junta, para sacar abonos para lo que resta de temporada (menos de 200 euros por doce partidos). Cuando lleguen los buenos tiempos serán los primeros en sacar pecho.

Ahora, a Huesca, a buscar los tres puntos. De Getafe me olvido.

Libero.



8 comentarios:

  1. Cuando un equipo es superior a otro y le da vidilla puedes al final pagarlo y llevarte una sorpresa. El Betis es más equipo que el Nàstic, eso no hay nadie que lo dude, pero el solo hecho de haberemos metido un poco el miedo en el cuerpo ya es de agradecer por el equipo. Hemos tenido una oportunidad grande de poder sacar hoy un puntillo del Benito V. ante la pasividad del Betis pero no metemos un gol ni al arco iris. Otra vez será. Suerte y a primera.

    ResponderEliminar
  2. Ayyyyyy , amigo Jaime que quieres que te diga , que vaya tela con el Nastic tio , para que veas que en segunda no te puedes fiar de nadie , a priori era o debiera haber sido un paseo ( con todos los respetos hacia el amigo Lavape ) pero bueno....se ha ganado que es lo importante ¡¡ nos vemos crack ¡¡

    ResponderEliminar
  3. el betis parece imparable en su camino a primera,enhorabuena
    saludos desde Malaga

    ResponderEliminar
  4. Quizás fue el peor partido del Betis esta temporada.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  5. No fue un buen partido, pero hay que quedarse con la importancia de los tres puntos.

    Saludos, Jaime!

    ResponderEliminar
  6. Hola Jaime!
    Sufristeis pero sacásteis el partido adelante. Vais de cabeza a Primera, donde merecéis estar.
    Quedas enlazado tu también.

    Un saludo!

    ResponderEliminar
  7. Hola , que mal partido..quería preguntarte si participas en Almabetica...saludos .

    ResponderEliminar
  8. Cuando se gana jugando mal es que estás haciendo las cosas bien. Saludos.

    ResponderEliminar