El Análisis de la primera jornada por Alberto González

Comenzó una nueva temporada, una nueva fuente de ilusiones, y como no podía ser de otra forma, a un equipo tan especial, el destino le tenía preparado un estreno en un marco incomparable, nada más y nada menos que el Santiago Bernabéu, ahí es “ná”.

Y a las 21:00 horas de un domingo 18 de agosto, el balón empezó a rodar, y en lo que nos atañe, el Real Betis Balompié, hay mucho que destacar, y casi todo bueno. Como consideración previa, en relación al rival, no debemos obviar que, aunque el Madrid siempre es el Madrid, los merengues no estuvieron nada afortunados, su sistema defensivo hizo aguas en todo momento, es lo que tiene colocar dos laterales tan ofensivos y un centro del campo con tendencia a jugar por dentro y dejar enteritas las bandas a los laterales, con un solo medio de cierre (Khedira), la espalda de Carvajal y Marcelo era una autopista, sin apenas coberturas ni presión colectiva, con un equipo partido, era el día propicio para arrancarle algún punto a los capitalinos, lo que estuvo muy próximo a suceder.

Ya centrándonos en el Real Betis, como decía antes, mucho y muy bueno. Pepe Mel no se anduvo con contemplaciones, no esperó al Madrid, fue a por él, presión a la salida del balón tapando a los jugones y logrando que fuese Khedira el que tuviera que sacarlo, algo para lo que no está demasiado dotado, todo ello acompañado de una defensa por momentos muy adelantada y que sorprendió con un excelente nivel de sincronización tirando el fuera de juego, máxime a las alturas de temporada a las que estamos. En definitiva, un planteamiento muy atrevido y valiente, a la par que efectivo, puesto que el Madrid estuvo tácticamente a merced del Betis hasta que el cansancio comenzó a hacer acto de presencia, si ese tiro de Verdú que pudo ser el 0-2 llega a entrar, posiblemente otro gallo hubiese cantado.

A nivel individual, nota alta a todos los jugadores. Andersen estuvo bien en la portería, los laterales y centrales en su conjunto hicieron un trabajo excelente (cuidado Perquis con ir tan a lo loco), Verdú hizo mucho y muy bien, ayudando en construcción y desahogando desde la media punta cuando era necesario, Matilla muy esforzado en una faceta distinta a la habitual, sin obviar su buen trato de balón, Nosa muy bien en la faceta ofensiva, aunque debe aprender a ser más solidario y continuo en defensa, Cedrick una tortura para la defensa merengue con su velocidad, Jorge Molina moviéndose con mucha inteligencia, etc. Nada que reprochar a este Betis, al revés, lo que se vio es para estar muy esperanzado de cara a esta temporada. La única duda, la de siempre, ver si el equipo va a ser habitualmente así de “intenso” o, como es tradición en los equipos de Mel, vendrá la típica fase “torrija” en la que, durante bastantes jornadas, parece que el equipo saliese a un museo en vez de a un campo de fútbol, algo que lleva sucediendo desde que el bueno de Pepe dirige al equipo, y algo que ya le pasó en su periplo como entrenador del Rayo. En cualquier caso, este hombre es una bendición para el Betis, es nuestro “Melguson” particular, y la temporada promete, a poco que jugadores como Xavi Torres o Reyes entren en la dinámica del equipo hay plantilla para hacerlo muy bien, destacando especialmente nuestro centro del campo. Veremos si se confirman todas estas buenas impresiones, ojalá.

Alberto González

@albertusG