Betis 1-1 Espanyol. Incomprensible...

Cara de tontos se nos quedó a todos los que estábamos en la grada del Benito Villamarín, cuando el rifle encañonó y fusiló a Fabricio en el 92´.

El Betis salió igual que la segunda parte de Vallecas: impreciso, perdiendo balones y sin dar tres pases buenos. Es incomprensible la poca sangre, las pocas ganas que le echó ayer un jugador en concreto. Si te dan una oportunidad de jugar de titular, sal a comerte el balón, corre, lucha, pelea, muere para que el míster te vea que le echas ganas, pero no. No se llevaban ni quince minutos del primer tiempo, y Juanma no fue a por un balón al que llegaba fácil si hubiera echado un sprint, pero decidió pararse y no luchar.

Los minutos pasaban y el Betis seguía igual. Ni uno tiraba a puerta y el otro tampoco. A falta de quince, diez minutos, el Betis empezó a tocar y a crear un poco de peligro, pero al descanso, el resultado era empate a cero.

        
 Se presuponía que Pepe Mel iba a cambiar a Juanma en el descanso, pero salió al terreno de juego con el mismo once.

          El primer cambio del Betis fue Pereira entró por el desastroso Juanma. El gallego le dio otro aire al equipo verdiblanco.  Pereira centró a Rubén y este remató y convirtió el gol verdiblanco en el minuto 78. Buen trabajo de Jonathan Pereira.

En el minuto 60 el cambio fue Pozuelo por Molina. El canterano trianero lleva unos partidos muy mal. No da ni una, y ayer ya fue el colmo. No puede perder un balón en el 92´, y si lo pierde lo que tiene que hacer es intentar recuperar la posesión y en todo caso hacer una falta. Lo que no tiene que hacer es mirar al rival y dejar que pase a placer. Y tras ese gran fallo, llegó el Rifle que mandó el balón al fondo de la red en el minuto 92.

El Real Betis no se merecía la victoria, pero cuando la tienes en la mano, perder dos puntos en la última jugada del encuentro, te deja con cara de tonto. 

        A pesar de todo hay que mirar el lado positivo: Una jornada menos, y un punto más de diferencia con el descenso, ya que el Sevilla ganó al Racing. Siete puntos de distancia que el domingo tienen que ser diez.

En cuanto a lo negativo: la actitud incomprensible de Juanma por un parte por otra y Pozuelo. Que el canterano juegue con el Betis B, porque los últimos partidos que ha disputado nada de nada. Siento ser tan claro, pero es así.

         El domingo a las 19:45 -¿Vaya horario no? Gracias a los Astiazaran y Roures…- el Betis juega otra final, y esta es de los partidos que no se juegan, sino que se ganan.

El Benito Villamarín tiene que estar a reventar. La afición tiene que acudir al campo como en el partido del Madrid y animar, gritar, cantar y apoyar a los jugadores que visten la camiseta del Real Betis durante los 90 minutos.

La afición no podemos fallar, y por eso pedimos desde Prisma Verdiblanco que el domingo no se deje de animar ni un segundo.

Con nuestro aliento y nuestro apoyo, PODEMOS.

        

Jaime Sánchez