Volvió el derbi a Sevilla, el
derbi de los derbis, uno de los mejores partidos de la Liga BBVA, por no decir
el mejor.
Tras los dos años en segunda del
equipo verdiblanco, en los que no se disputó este partido de rivalidad, y tras
la huelga en la primera jornada de liga, llegó el gran día, en el que todos,
tanto sevillistas como béticos señalan en el calendario como día importante.
Como
siempre un partido de este calibre, vale más de tres simples puntos, el que
gane a parte de los puntos, consigue una dosis de moral superior, y el que
pierde, al contrario.
Sevilla entera estaba deseando
que llegaran las diez de la noche del sábado, y al fin después de tanta espera,
llegó el gran momento.
El Real Betis salió con algunos
cambios con respecto al partido del Barcelona, Cañitas entró de central por el
sancionado Mario, y Juanma por Salva Sevilla. Enfrente el rival no podía disponer
de Kanoute por sanción. El partido prometía espectáculo, y así fue.
El equipo de Marcelino salió como un ciclón, atacando una y otra vez y poniendo en ocasiones en apuros al cancerbero bético, por cierto, ¡qué gran partido de Casto! Las llegadas del Sevilla llegaban por la banda de Navas, que una y otra vez ponía la quinta marcha y centraba siempre que podía. Gran partido de el de los Palacios, que dio más de un quebradero de cabeza a Nacho.
El
dominio era del equipo sevillista, pero el futbol es imprevisible, y cuando los
nervionenses estaban en su mejor momento, apareció Beñat para adelantar al
Betis de un libre directo precioso. Golazo en el que Varas poco más pudo hacer.
El Sevilla seguía intentándolo,
y los saques de esquina eran un peligro para el equipo bético, ya que todos
buscaban a Fazio. El gol sevillista se veía venir y a falta de cinco minutos
para terminar el primer tiempo, un centro del ya mencionado Navas, para mí el
mejor del equipo sevillista, centró perfectamente para que Negredo saltase y
colocara el balón en la redes de la portería defendida por Casto.
Con el empate uno se llegó al descanso, un resultado justo.
Si la
primera parte fue del Sevilla, la segunda empezó por el mismo camino, pero
pocos minutos duró, ya que el Betis empezó a controlar y dominar el partido
hasta el final del partido. Entro Pozuelo por Montero, el canterano se había
perdido los partidos de Barcelona y el del Sporting.
Con la expulsión de Fazio, el
Betis se echó mucho más arriba y empezaba a controlar el partido. Lo intentaba
una y otra vez, y con la entrada de Salva Sevilla por Juanma creaba mucho más
peligro.
El
gol bético no llegaba y los minutos pasaban rápidamente. Pepe Mel a falta de
siete minutos hizo el último cambio, metió a Molina, quería la victoria, y así
lo demostró con el tercer cambio.
El
encuentro llegó a su fin con el empate a uno. Un resultado justo ya que cada
parte fue de un equipo. Aunque el bético tal vez no esté contento plenamente
porque pudieron marcar en la segunda mitad el gol de la victoria que no llegó,
o tal vez también por dos posibles penaltis q no pitó el colegiado. Uno de
ellos a Molina, dudoso, aunque lo agarra y cuando el delantero pierde el
equilibrio, el sevillista Cáceres le suelta. Y el segundo y creo que más claro,
fue el derribo a Juanma, también en la segunda mitad. Pero el empate en
definitiva es el resultado justo para ambos conjuntos.
Lo positivo: el gran partido que
se pudo ver entre los dos equipos sevillanos. Y también la ausencia de
violencia.
Lo negativo: el mal partido que
hizo Iriney, no parecía él, y la colocación de Cañas de central, no es su
sitio.
Ahora el conjunto verdiblanco
tiene que empezar a preparar un partido importante contra el Granada en casa.
Tiene que conseguir la victoria y así colocarse con 26 puntos.
Jaime
Sánchez
Es verdad , fue un gran partido en el que encima hubo mucha deportividad . Un ejemplo de buen fútbol en todos los sentidos , una fiesta para todos .
ResponderEliminarUn saludo
Partido entretenido y emocionante. COmo habéis remarcado lo mejor las dos aficiones, un diez para cada una. Con este Betis no es descabellado pensar en luchar por Europa. Saludos
ResponderEliminarLastima esos penaltys que no nos pitaron......
ResponderEliminarUn partidazo en toda regla. No sabemos qué hubiese pasado si Iriney hubiese estado al 100 por cien.
ResponderEliminarSaludos desde La Escuadra de Mago